La ciudad georgiana de Bath, situada en el suroeste de Inglaterra, es reconocida por sus elegantes arquitecturas georgianas, historia romana y aguas termales. Aquí tienes los lugares imprescindibles para los turistas que la visitan por primera vez:
Las Termas Romanas de Bath son una pieza central de la ciudad. Este antiguo complejo romano ofrece una mirada a las piscinas termales, los restos arqueológicos y la historia detrás de estas aguas que datan de hace dos mil años.
El impresionante baño terapéutico natural, Thermae Bath Spa, permite a los visitantes sumergirse en las aguas termales naturales y ofrece vistas panorámicas de la ciudad desde su piscina en la azotea.
El majestuoso Royal Crescent, un conjunto de casas georgianas en forma de media luna, es un ícono arquitectónico que muestra la grandeza de la época georgiana. También, la impresionante arquitectura georgiana de la calle Great Pulteney Street es digna de admirar.
La Abadía de Bath, una hermosa iglesia gótica, es un monumento histórico y religioso clave que ofrece recorridos para conocer su historia y arquitectura.
El Museo de Jane Austen ofrece un vistazo a la vida y las obras de esta famosa autora, que pasó tiempo en Bath y se inspiró en la ciudad para algunas de sus novelas.
El Circo y la Plaza de la Reina son otros ejemplos destacados de la arquitectura georgiana y ofrecen oportunidades para pasear y disfrutar de la atmósfera única de Bath.
Los jardines botánicos de la ciudad, los Royal Victoria Park y el Sydney Gardens, son espacios verdes encantadores para relajarse y disfrutar de la naturaleza.